✶ “El cine español va a ser más necesario que nunca en las salas”



Esta es una de las afirmaciones realizadas en el tercer Encuentro de la Industria del Cine organizado por Comscore, que se centraba en cómo ha afectado a los rodajes y proyectos o cuáles son las posibilidades y las expectativas de cara al futuro.

Desde el pasado día 3 de abril, Comscore viene organizando unos webinar. El último de ellos, realizado el pasado viernes día 24, estuvo especialmente centrado en el ámbito de la producción. El evento estuvo moderado por Joaquín Vegas de Comscore, compañía de la que también han participado David Rodríguez (General Manager Spain & Portugal Comscore Movies) y Arturo Guillén (SVP & Global Managing Director Comscore Movies).

Y la mesa virtual estuvo dirigida por Carles Montiel, responsable de la división de Cine en The Mediapro Studio, dando paso a los comentarios de Ghislain Barrois, CEO de Telecinco Cinema; Álvaro Augustín, director general de Telecinco Cinema; M.ª Luisa Gutiérrez, directora general de Bowfinger y Amiguetes; y Carlos Prada, vicepresidente de Distribución de Cine y Producción Local en Warner Bros. Pictures.

David Rodríguez fue el encargado de realizar la introducción, mostrando datos estadísticos comparativos en relación a la taquilla de este año y también sobre posibles escenarios de futuro. El representante de Comscore afirmaba que “aunque ahora la prioridad sea volcarnos en la seguridad y transmitir a la sociedad que el cine es un entorno seguro, el producto debe ser un pilar importantísimo para la recuperación del sector”.

Concretamente, el cine español va a tener una gran oportunidad. En realidad, el cine español lleva tiempo “cada vez con más peso específico” en la taquilla y, de hecho, en 7 de los 10 últimos años hay una película española en el Top-5. “El producto local va a ser clave. Lo ha sido y en estos momentos lo va a ser más que nunca”, añadió Rodríguel.

Por su parte Arturo Guillén, ofreció una visión internacional de la situación. “Lo que no podemos arriesgarnos es a una recaída. Con estas reuniones, buscamos evitar los errores de otros países”, declaró refiriéndose a los cines de China que abrieron y volvieron a cerrar.

Para Carlos Prada, lo de China fue un experimento de aplicación muy localizada (700 pantallas de las 41.500 disponibles) pero considera que “no debería haberse hecho” ya que estima que “cuando abramos, tenemos que ir con todo”.

Carles Montiel introdujo el tema de cómo ha afectado el coronavirus a los rodajes de los intervinientes, poniendo en contexto a los asistentes diciendo que, a tenor de los datos de Spain Film Commission, desde el 11 de marzo se han suspendido en España en torno a 300 rodajes, y de ellos el 11% son largometrajes, por lo que, como incidió, “el daño en el sector es bestial”.

Mª Luisa Gutiérrez habló del parón de Padre no hay más que uno 2 que se tuvo que paralizar a falta de sólo dos días de rodaje. “Ahora nos estamos planteando si podremos volver a rodar o si tendremos que reescribir el guion sobre la marcha”, manifestó. Además, tenían otro proyecto entre manos, La casa 15/16, una película de Imanol Uribe, que tenía que haber comenzado a rodarse a finales del pasado mes de marzo en Colombia. “No sabemos cuándo podremos arrancarlo porque no dependemos únicamente de lo que está pasando en España sino también de las medidas que se tomen en Colombia y lo que pase con los vuelos internacionales”, resaltó la a directora general de Bowfinger, quien apuntó que, a pesar de la situación, están trabajando mucho y “se ha creado mucha unidad en el sector para empujar y hablar con las instituciones no para poner solución a la crisis sanitaria pero sí para poder hacer fiable el volver a rodar cuanto antes”.

Algo en lo que coincidió Ghislain Barrois, apostillando que “en un escenario tan caótico, es fundamental que en nuestro sector presentemos un frente común y por eso estos encuentros son muy importantes”.

El CEO de Telecinco Cinema subrayó que “Mediaset está haciendo un esfuerzo descomunal con la televisión para intentar mantener la normalidad. Desde siempre tenemos claro la misión de servicio público. Como broma, a veces decimos que deberíamos cotizar en el IBEX con las farmacéuticas porque ofrecemos medicación contra la soledad y ahora con este confinamiento estamos acompañando a millones de personas”.

Álvaro Augustín habló de los casos concretos de Telecinco Cinema, recordando que tenían programado el estreno de Operación Camarón para el 13 de marzo. “Hasta diez días antes, teníamos claro que debíamos ir a las salas y no contribuir en el miedo de la gente. Pero tomamos la decisión de posponer y muchos seguramente pensaron que estábamos locos pero el tiempo nos ha acabado dando la razón. Ha tenido un coste económico muy grande, hemos perdido mucho dinero, pero acertamos plenamente”.

La fortuna es que no nos ha pillado ningún rodaje en marcha. Tenemos la postproducción de dos películas y un par de rodajes planteados para el otoño. La postproducción se está llevando más o menos con normalidad”, explicó, añadiendo que el inicio de la producción de Tadeo la están sacando adelante a través del teletrabajo.

En el caso de los nuevos rodajes es más pesimista. Ahora hay muchas discusiones sobre los protocolos de seguridad, pero no quieren iniciarlos hasta que haya más certeza. “Yo estoy convencido de que en octubre y noviembre vamos a estar rodando de nuevo, pero tengo que tener la certeza. Trabajar al menos con unas condiciones mínimas de seguridad porque la seguridad total de antes no la vamos a poder recuperar en un año o dos”.

Barrois teme el reconfinamiento, que hubiera que tener que parar de nuevo, por lo que prefieren la cautela por el momento. “Los protocolos de seguridad nos parecen razonables, pero están vertebrados sobre los tests pero que yo sepa, no los hay o muy pocos”, manifestó, a lo que Augustín añadió que, aunque haya tests, podría ser un drama si alguno de los miembros esenciales da positivo.

Gutiérrez sí se mostró más optimista y cree que se va a poder rodar en julio, aunque aplicar los protocolos dificultará las cosas y encarecerá la producción y apuntó que, sobre el tema de los seguros “se está trabajando en el consorcio de los seguros porque nunca te han cubierto las pandemias pero ahora específicamente no te van a cubrir el COVID-19. Se está trabajando en un seguro que dé cobertura a los seguros porque si no, sería inviable o muy arriesgado”.

Prada también es optimista y espera que en verano se pueda reiniciar la actividad, aunque “nadie sabe nada”. Él también se refleja en el espejo de la televisión. “Aunque los programas son diferentes a los rodajes de cine, no se han dejado de hacer y parece que van funcionando. Incluso formatos complicados se van a poner a funcionar en las próximas semanas. Aprendamos de ello”, destacó.

Hay que recordar que Warner empezó el año pasado a coproducir películas. De hecho, trabajan nada menos que en 9 producciones. “Tenemos una de animación (Moomios) en la que hemos podido mandar a 90 personas que estaban en el estudio de Guadalajara (Core Animation) a sus casas porque una empresa nos dio el servicio para que pudieran teletrabajar y milagrosamente no hemos sufrido ningún retraso”.

Asimismo, tienen otra en postproducción en la que se está pudiendo avanzar desde las casas. Los otros siete proyectos están en preproducción o haciendo planes de rodaje.

Montiel planteó el problema que tendrá el sector cuando se reactiven los rodajes: las fechas, a que habrá personal técnico o artístico comprometido con proyectos y que haga que otras producciones se demoren más.

Augustín señaló al respecto que “paradójicamente, el cuello de botella ya existía antes del COVID-19. Tú tenías que pedir el turno para un actor o incluso para un técnico y no hablo de elegir al mejor director de fotografía, por ejemplo. Los actores últimamente nos dicen a menudo que no se pueden comprometer a la promoción, que para nosotros es muy importante”, ha indicado Augustín, subrayando que con esto se va a agudizar más.

Gutiérrez también está de acuerdo con ello, porque “todos los que están en preparación están avanzando y va a haber un momento que se van a juntar los rodajes que ya estaban para arrancar con los que quieren arrancar”. La productora apeló a ser civilizados y respetar el orden de rodajes, de modo que, si hay conflictos de compromisos, debe empezar antes quien paralizó el rodaje, por ejemplo.

Prada añadió que ese ese cuello de botella se trasladará a las salas, algo que preocupa a Telecinco Cinema. “Nuestro modelo funciona alrededor de las salas. Producimos pocas películas y las promocionamos a tope. Nos preocupa mucho poder estrenar con público dispuesto a ir a las salas. Nos jugamos la vida en esto”, expresó Barrois.

Y es que uno de los aspectos en los que sobresale Telecinco Cinema es en la promoción. “Hemos reconvertido una obligación en una oportunidad. Hacemos, como máximo, 4-5 películas al año e intentamos que sean un evento, y para que sean un evento hay que promocionarlas a tope. Y ahí somos unos privilegiados porque tenemos un altavoz gigantesco de un medio que se pone a nuestra disposición”, comentó Álvaro Augustín.

Pero ante situación excepcional, lo primero es promover que se vaya al cine, en general. En ese sentido, Barrois apuntó que han iniciado una campaña de promoción de dos fases. La primera fase es para instar a que la gente se quede en casa, pero habrá una segunda que es con el mensaje de “ven a ver las películas a los cines”.

Lo que es la promoción en sí de sus próximos títulos no se verá muy afectada. “En la promoción esto no nos cambia la vida. Aunque cuando lleguemos al momento del marketing de la película, habrá que hacer cosas virtuales, por ejemplo, nos olvidaremos temporalmente de los junkets de prensa de forma presencial”, mencionó Augustín.

Gutiérrez sí que reconoció que están estudiando cómo hacer un posible lanzamiento con Sony Pictures si consiguen llegar al estreno previsto del 7 de agosto de la segunda entrega de Padre no hay más que uno. “Pero con los aforos limitados, vamos a tener que llegar a acuerdos con los exhibidores y distribuidores para que sean beneficiosos para todos. El cine nacional está en nuestras manos, pero el americano depende de los ejecutivos de Los Ángeles. Podemos dar un empujón e invito a que haya un diálogo porque los productores nunca están sentados en la misma mesa con los exhibidores”, ha instado la productora.

El representante de Warner comentó que ellos están digitalizando clásicos para tener contenido para los cines en los primeros compases y también tienen lista y doblada Pinocho de Matteo Garrone, además de estar oteando en el mercado para adquirir algún título. Todo ello porque el estudio “se está replanteando todas las estrategias” ya que “en Estados Unidos están más afectados que nosotros”.

Y aquí llega la oportunidad para nuestra cinematografía. “El cine español va a ser más necesario que nunca en salas. Las películas americanas van a empezar a llegar con cuentagotas. Es un buen momento para demostrar que el cine español puede ser una alternativa”, recalcó Prada.

En lo referido al desarrollo de proyectos, a pesar de que se pudiera pensar que hay cautela o paralización, lo cierto es que todos coincidieron en decir que están trabajando en ello a pleno rendimiento.

Según Barrois, están trabajando “a tope” en estos momentos. “Ya que no podemos rodar, sólo nos queda esto. Los guionistas no notan tanto la diferencia porque ellos están confinados el resto del año. Estamos aumentando nuestro portfolio de proyectos y con videoconferencias estamos conectadísimos y está siendo muy eficaz”, ha declarado el CEO de Telecinco Cinema.

“Yo no dejo de leer una película porque sea una coproducción internacional. No estamos sesgando porque pensemos que en 2021 no se va a poder hacer”, agregó Augustín.

No obstante, algunos guionistas pueden autocensurarse en estos momentos, por temor a plantear guiones inviables. En este sentido, Barrois recordó que hace un año estaban rodando una escena de Way Down cortando Cibeles y con 1.000 extras y 600 personas de equipo: “Hoy en día eso no se podría hacer”.

Prada también desveló que están muy activos: “Pensamos que esto pasará rápido y estamos acumulando proyectos. Esto no cambia un ápice nuestra estrategia, de momento”.

A pesar de ser menos optimistas que el resto, los representantes de Telecinco Cinema también pusieron su granito de esperanza. Barrois se hizo eco de un estudio realizado en Francia  en el que se refleja que lo que más echa de menos la gente allí es poder ir al cine. ¿Es el país galo una excepción? Creemos que no.