El Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, SITGES, ha comenzado su 57ª edición con la proyección de Presence, la última película de Steven Soderbergh. La gala inaugural contó con la presencia de destacadas figuras del cine y la cultura, además de homenajear a la directora Mar Targarona. Con un vibrante inicio de secciones y actividades, el festival promete una edición inolvidable.
El Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, conocido como SITGES, ha comenzado con fuerza su 57ª edición. Este prestigioso evento, dedicado al cine fantástico, ha arrancado con la esperada proyección de Presence, la última película del aclamado director Steven Soderbergh, quien ha sido una de las grandes estrellas de la jornada inaugural. Además de esta destacada producción, el Festival ha ofrecido las primeras sesiones especiales con la proyección de House of Spoils y la nueva adaptación de El misterio de Salem’s Lot, dos títulos que han capturado la atención de los asistentes.
Como es tradición en Sitges, los más jóvenes fueron los primeros en estrenar el Auditori con una sesión especial para escuelas. En esta ocasión, disfrutaron de Dalia y el libro rojo, una encantadora película de animación 3D dirigida por David Bisbano, que recuerda a la obra de Borges. La sección Anima’t también ha dado la bienvenida a los espectadores con la proyección de Memorias de un caracol, una producción en claymation de Adam Elliot, el aclamado director de Mary and Max. Junto a ella, la antibelicista The Glassworker, del cineasta pakistaní Usman Riaz, también se proyectó, reafirmando la sólida relación del festival con el cine de animación.
La gala de inauguración ha sido otro de los puntos culminantes del día, con la presencia de figuras destacadas como Fred Dekker, Carlota Pereda, Lisa Dreyer y Christophe Gans, miembros del jurado oficial. Conducida por Ángel Sala y Mònica Garcia i Massagué, la gala contó con la participación de reconocidos invitados institucionales como Ernest Urtasun, Ministro de Cultura, y Aurora Carbonell, alcaldesa de Sitges. Entre los momentos más esperados de la noche estuvo el homenaje a Steven Soderbergh y su película Presence, la cual cautivó al público del Auditori, consolidando su reputación como uno de los grandes maestros del cine contemporáneo.
Además de Soderbergh, la directora y productora catalana Mar Targarona también fue homenajeada durante la gala, recibiendo el premio Woman In Fan por su destacada contribución al cine fantástico nacional. Targarona, productora de éxitos como Los ojos de Julia y El Orfanato, fue reconocida por su extensa carrera y su valiosa aportación al cine español, tanto en su faceta de productora como de directora.
La Sección Oficial Fantàstic a Competició comenzó con dos destacadas proyecciones: Twilight of the Warriors: Walled In, del director hongkonés Soi Cheang, y El segundo acto, una comedia de Quentin Dupieux, que ya había sido presentada en el pasado Festival de Cannes. Ambas películas prometen ser grandes contendientes en la competición de este año, aportando estilos únicos que van desde la acción trepidante hasta el humor absurdo.
El público del Prado también disfrutó de dos sesiones especiales, comenzando con la adaptación de El misterio de Salem’s Lot, dirigida por Gary Dauberman, y House of Spoils, de Bridget Savage Cole y Danielle Kurdy, un thriller culinario con toques de terror que emocionó a los fanáticos de Blumhouse. Por su parte, la sección Órbita dio el pistoletazo de salida con The Moon Thieves, una vibrante comedia de acción, y Diabolik: ¿Quién eres? de los Manetti Bros, que regresaron a Sitges con la tercera entrega de esta saga detectivesca. En esta misma sección, los espectadores disfrutaron de I, The Executioner, una película surcoreana que trajo acción y suspense al Auditori.
La programación del primer día también incluyó la apertura de la sección Panorama con The Damned, de Thordur Palsson, un atmosférico thriller psicológico, y la secuela El vigilante nocturno (demonios heredados), del director Ole Bornedal, que encantó a los asistentes con su carga de tensión y horror. Además, Noves Visions debutó con Witte Wieven, el primer largometraje de Didier Konings, una inquietante historia sobre fanatismo religioso.
No faltaron las actividades paralelas, tan características del Festival de Sitges. La zona FOODTASTIC abrió sus puertas para ofrecer lo mejor de la gastronomía, mientras que los amantes del merchandising pudieron visitar la FANSHOP, repleta de productos relacionados con el cine de terror. Los más valientes también disfrutaron del pasaje del terror Rodaje maldito, una experiencia gratuita en el Centre Cultural Miramar. Además, el Festival alberga dos exposiciones imperdibles: ‘ONE OF US!!! A FREAKS COMIC TRIBUTE‘ y ‘Los extraños colores de Vranckx’, dedicadas a la ilustración y el arte cinematográfico.
En resumen, el primer día del Festival de Sitges ha sido una celebración completa del cine fantástico, con proyecciones emocionantes, invitados de lujo y actividades para todos los gustos. El evento ha arrancado con fuerza, prometiendo una edición inolvidable llena de sorpresas y emociones.
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